50 separatistas agreden brutalmente a un estudiante por repartir propaganda a favor de España

 

 

 

 

   Medio centenar de separatistas y extremistas de izquierda, miembros de Unitat Contra el Feixisme (UCFR), agredieron brutalmente a un estudiante por repartir octavillas que informaban sobre la manifestación que tendrá lugar el sábado en Plaza Cataluña, en defensa de la hispanidad. Los separatistas propinaron numerosos golpes al estudiante entre insultos y amenazas de muerte.

 

   Los hechos transcurrieron ayer cuando miembros del Casal Tramuntana, que repartían propaganda sobre la concentración del sábado en Barcelona en la parada de metro de la zona universitaria, fueron objeto de amenazas por parte de un grupo de separatistas, alguno con camisetas etarras, quienes les gritaron: “Españoles hijos de puta”, “Os vamos a matar” y “Fuera fascistas de la universidad”.

 

   A continuación, los separatistas rodearon al estudiante que portaba la bolsa con todo el material propagandístico para intentar arrebatársela. Al no lograr su objetivo, los violentos zarandearon y tiraron al suelo al joven patriota, donde recibiría varios golpes en la cabeza y otras partes de su cuerpo.

 

   Pasados unos minutos de la brutal agresión, se personaron en el lugar de los hechos dos agentes de los Mossos de Escuadra, quienes, como suele ser habitual, se mostraron incapaces de identificar a uno sólo de los agresores separatistas, pese a que todos ellos se refugiaron dentro de la facultad. “Lamentamos la total ineficacia de los Mossos que tras ello no han realizado ni un solo esfuerzo por perseguir a los agresores, justificándose de forma triste y patética su incapacidad”, señala en una nota el Casal Tramuntana.

 

   Pese a la salvaje agresión y a la inoperancia de la policía política catalana, los miembros del Casal Tramuntana continuaron repartiendo folletos.

 

   Ante estos lamentables hechos el Casal Tramuntana manifiesta: “En primer lugar, el más profundo de los desprecios hacía esa cincuentena de cobardes que necesitan refugiarse en la muchedumbre para actuar de la forma más innoble, sin honor y sin valores. Y en segundo y último lugar, que ninguna agresión, mentira, intimidación nos va a detener y que nada nos va a parar hasta que consigamos todos los objetivos tácticos y estratégicos de nuestro movimiento, y menos cuando éste sea la defensa de la Patria”.