Las cruces que se salvan de la ‘quema’ de la izquierda, por Javier Arias

Javier Arias

Los recientes resultados en las elecciones municipales han propiciado algunos importantes cambios en varios ayuntamientos de España. A priori, estos cambios supondrían la salvación de algunas cruces situadas en la vía pública que los gobiernos de izquierdas amenazaban con quitar.

En Elche la suma de PP y VOX permitirá arrebatar el gobierno a la izquierda y que Pablo Ruz (PP) sea el próximo alcalde ilicitano. Durante la pasada legislatura, el equipo de gobierno compuesto por PSOE y Compromís, estuvo estudiando el modo de derribar la cruz de Elche situada en el paseo de Germanías.

Esta intención fue descubierta gracias a una auditoria. Con motivo de la remodelación del paseo de Germanías, donde se encuentra la cruz, en los pliegos de la licitación no se decía nada de la cruz. VOX llevó en abril del año 2021 una moción al pleno en defensa de la cruz. Les apoyaron PP y Cs pero no prosperó ya que la tumbó el equipo de gobierno formado por PSOE y Compromís. Fue en ese pleno donde se destapó todo. El PSOE argumentó que la querían quitar por estética ya que «era fea» y Compromís defendió que se trataba de un símbolo franquista y para cumplir con la ley de memoria histórica debían quitarla.

PP y Vox recogieron firmas también por su cuenta en la ciudad y lograron unas 6.700 firmas de vecinos de Elche en menos de un mes. En cambio, a favor de retirar la cruz solo consiguieron 60 firmas de profesores de historia. Todo hace indicar que la cruz permanecerá en su lugar, al menos, durante los próximos cuatro años.

La cruz de los caídos en Cáceres también seguirá en su lugar gracias a la mayoría que alcanzan la suma de concejales de PP y VOX. El pasado mes de marzo el candidato de VOX, Eduardo Gutiérrez, aseguró que «si en un futuro más o menos próximo, alguna fuerza política tiene previsto negociar con Vox algún tipo de acuerdo del tipo que sea, que sepa que el traslado de la Cruz de los Caídos para nosotros es innegociable; la Cruz no se toca». Gutiérrez defendió que «en una ciudad en la que la religión absolutamente predominante es la católica, como se puede comprobar en Semana Santa y tantas otras fiestas del calendario anual, no se puede entender que se quiera quitar o cambiar de ubicación la Cruz, al tiempo que se quiere construir una figura de un Buda de más de 40 metros, es absolutamente absurdo y carece de la más mínima coherencia».

Las cruces que la izquierda sí logró derribar
Quien parece que ha muerto matando es el PSOE de Barrado, en Cáceres. Acaba de perder la alcaldía del municipio por tres votos y como acto de despedida han derribado la cruz que había en el pueblo.

Según diversas informaciones, en Barrado, un pueblo cacereño del Valle del Jerte, tras perder la alcaldía, el PSOE decidió despedir su mandato derribando la Cruz del pueblo que representaba a todos los ciudadanos caídos. pic.twitter.com/AVj8OP594d

— Dirdam™ (@Dirdam2) May 30, 2023

La candidata del PP ha manifestado en declaraciones a COPE que «quiere pensar que ha sido una casualidad» que el inicio de las obras de la retirada de la cruz —aprobada en virtud de la ley de Memoria Histórica— haya coincidido con la derrota electoral de los socialistas.

En Castellón la izquierda ha perdido la alcaldía. Podemos desaparece del ayuntamiento y el PSOE y Compromís suman menos concejales que PP y VOX. En esta localidad, el pasado mes de enero el ayuntamiento se gastó la friolera de 60.000 euros para derribar la cruz de Ribalta por ser un símbolo «franquista».

En cambio, en la localidad cordobesa de Aguilar de la Frontera, la izquierda podrá seguir gobernando el municipio a pesar de haber derribado la cruz situada en el convento de las Descalzas. La alcaldesa comunista de Aguilar de la Frontera defendió que lo hacía para dar cumplimiento a un mandato legal que obliga a eliminar todas las construcciones con simbología franquista, porque “a nadie puede escapar cuál fue el origen por el que el Consistorio en el año 1938 decidió construir esta cruz”.