Entrevista a Santiago Marín Relanzón

EN EL 77º ANIVERSARIO DE LA LIBERACIÓN DEL ALCÁZAR DE TOLEDO    
 
 
Mª del Pilar Amparo Pérez García (Pituca) 
 
 
   Santiago Marín Relanzón es, actualmente, el Presidente de la Hermandad de Santa María del Alcázar, familiar de defensores del Alcázar de Toledo. A continuación podrán leer la entrevista que, amablemente, ha accedido a contestarnos: 
 
Pregunta: ¿Qué significa para usted la gesta del Alcázar de Toledo?  
 
Santiago Marín Relanzón: Aunque pueda parecer extraño, el significado se lo dieron los propios asaltantes, pues no tratándose de un enclave de especial importancia táctica ellos mismos se la dieron y son los que, por cómo se tomaron la toma del Alcázar, los que crearon la repercusión mundial que tuvo. ¿A qué puede ser debido esto? Pues que ellos, consciente o inconscientemente, entendieron que la Defensa/Ataque del Alcázar de Toledo no se limitaba a lo que desde un punto de vista puramente militar supone el mantenimiento/toma de un puesto, sino que lo que estaba en juego eran los ideales, los principios. Los que unos defendían y los que otros atacaban. Y esos ideales eran los de Dios, Patria y Justicia.  
 
 
P: ¿Qué vinculación tiene usted a este hecho heroico?  
 
S.M.R: Fue mi abuelo Andrés Marín Martín el que estuvo en el Alcázar durante el Asedio. Él no era militar, de hecho su estancia allí se debió a que su amistad personal con el Coronel Moscardó le llevó a enterarse de primera mano sobre el estado de la situación, y estando con él fue cuando Moscardó recibió la llamada de Madrid en la que ya le anunciaban la inminente llegada a Toledo de una columna de milicianos, lo que hizo que mi abuelo, en contra de los consejos que al respecto recibía de Moscardó, decidiera quedarse a colaborar en lo que fuera, que principalmente fue el aspecto religioso, con la dirección de rosarios y resto de oraciones dirigidas a la Virgen del Alcázar, elaboración del periódico que se editó durante el Asedio, escucha de la emisora para obtener tantas noticias del exterior como fuera posible, etc. Evidentemente esto no lo hizo solo, pero eran sus principales labores.  
 
P: ¿Qué funciones cumple la Hermandad de Santa María del Alcázar en la actualidad?  
 
S.M.R: La Hermandad tiene dos fines fundamentales. Como Hermandad religiosa, fomentar la devoción y culto a su titular, Santa María del Alcázar, advocación mariana que surgió ya desde los primeros días del Asedio, cuando así llamaron a la Inmaculada Concepción que estaba en el oratorio de la comunidad de monjas que atendían la enfermería dela entonces Academia de Infantería. Dicha imagen es la que seguimos venerando actualmente en la Catedral de Toledo, donde tiene una capilla propia. La otra finalidad es mantener vivo el recuerdo de los hechos históricos que nos dieron origen y el de los héroes que fueron sus protagonistas. Esta segunda finalidad está resultando cada vez más dificultosa, pues la situación sociopolítica de España en la actualidad más que no ayudar, lo que hace es impedir.
   Pero no nos dejaremos llevar por el desaliento, fijándonos en el ejemplo de los que defendieron el Alcázar aquel verano de 1936. Evidentemente, no sólo recordamos a los que defendieron el Alcázar, sino a los que lo liberaron, destacando de forma especial la figura del Generalísimo Francisco Franco, a quien en agradecimiento en su momento se le nombró Hermano Mayor de Honor de la Hermandad, único que hasta la fecha ha ostentado ese puesto, y este año, como máximos (si no únicos) mantenedores de su memoria, hacemos Hermano de Honor a la Fundación nacional Francisco Franco.
 
 
P: ¿Qué opina sobre que hayan convertido el Patio del Alcázar en un “salón de fiestas” para eventos, bodas y ferias?  
 
S.M.R: Yo creo que se dan dos circunstancias, una el afanoso intento de hacer pasar inadvertida la Gesta para evitar que se recuerde, quitando así el simbolismo que adquirió el histórico Baluarte a partir de ese momento. La otra es, dado que el edificio pierde la consideración que le dio la Gesta, ya podemos hace de él o en él todo lo que nos apetezca, con fines económicos, además. No sabría decir cuál es la causa y cuál la consecuencia, es decir, ya que al edificio le hemos quitado su simbolismo lo podemos usar para cualquier fin, o vamos a utilizar el edificio para actividades muy ajenas a él, para quitarle su simbolismo.
   Lo cierto es que me parece una falta de respeto a los héroes enterrados unos metros más abajo. Incluso considerando lo que es en la actualidad, es decir, donde se alberga el Museo del Ejército, el mejor Museo del Ejército del mundo, tal y como se nos ha venido diciendo, a mi me parece, como ciudadano de a pie, que utilizar la sede del mejor Museo del Ejército del mundo para actividades tan dispares como bodas o ferias comerciales desmejora mucho la imagen que supongo se pretende dar de él.  
 
 
P: ¿Qué opina sobre la manipulación histórica que existe sobre esta Gesta? ¿Y por la persecución que supone la Ley de Memoria histórica?  
 
S.M.R: La manipulación histórica sobre la Gesta del Alcázar comenzó prácticamente a continuación de ser liberado, porque, como he dicho antes, no se trataba sólo de la Defensa/Ataque de un punto estratégico o táctico militar, sino de la Defensa/Ataque de los valores que, le pese a quien le pese, son la cuna de la civilización occidental. Y esos valores siguen siendo atacados, y una forma de hacerlo es intentar hacer creer a quien se deje engañar, que lo que ocurrió en el Alcázar no es lo que ocurrió en el Alcázar. Y por lo tanto, esos valores deben seguir siendo defendidos. Y para eso también estamos nosotros.
   De la Ley de Memoria Histórica sólo puedo decir que es masonería pura llevada a la práctica, por eso la puso en vigor un masón, rodeado de masones y me temo que quien, a pesar de haberlo prometido, no la deroga no lo es mucho menos que quien la aprobó. O al menos algunos de sus colaboradores más cercanos.  
 
 
P: ¿Qué diría a los jóvenes de nuestros días sobre la gesta de El Alcázar?  
 
S.M.R: A los jóvenes de hoy en día habría que decirles muchas cosas de muchos temas, pues su falta no sólo de información sino fundamentalmente de formación es tan preocupante, que no sabría exactamente por dónde empezar. Actualmente en algunos colegios que se dicen religiosos (de eso también se podría hablar mucho) y en otros sin ideario específicamente católico, se habla mucho de la “educación en valores”, pero a la luz de los resultados, me temo que se hace realidad el refrán de “dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”, o también puede ser que eso que llaman “valores” no son precisamente aquellos por los que en su momento hubo quien sacrificó hasta su propia vida por defenderlos.  
   Sobre la Gesta del Alcázar, me conformaría con que leyeran historia, pero la de verdad, sin tergiversaciones ni sectarismos.  
 
 
P: ¿Quiere añadir algo más?  
 
S.M.R: Desde la Hermandad de Ntra. Sra. Santa María del Alcázar, el papel que queremos asumir es el de mantener viva la devoción a nuestra Titular, mantener viva la memoria de los hechos heroicos ocurridos en Toledo entre julio y septiembre de 1936 y mantener el recuerdo de todos aquellos que los llevaron a cabo, tanto dentro como fuera del Alcázar. Y lo seguiremos haciendo sin desfallecer, con la ayuda de Dios, hasta el final.