Rufo Gamazo Rico

 
PPG – FNFF 
 
 
 
Rufo Gamazo Rico nació en Villalonso, Zamora, en 1923. Periodista, docto en latín y humanidades. El 21 de enero de 1946, a la edad de 22 años, matriculado alumno de la Escuela de Periodismo de Madrid, publicó su primer artículo en el principal periódico de su provincia, El Correo de Zamora. «Ventura y desventura de los triperos» se titulaba aquel primer artículo.
 
   Durante su Servicio Militar, en el Regimiento de Infantería Toledo nº 35, en Zamora, colaboró en el diario matutino Imperio, de Zamora, donde coincidió con Gila. Allí realizó reportajes, entrevistas, críticas de teatro y hasta algún comentario del Evangelio con el aval de su pasado seminarista. Como no le estaba permitido firmar con su nombre por la normativa Militar, empleó en esa época el pseudónimo de “Don Puro”.
 
   En 1950, fue Jefe de Información del periódico vespertino La Prensa, de Barcelona, que dirigía Antonio Sánchez Gómez, el rondeño fundador de Hola. Escribió a diario en el vespertino una entrevista y el reportaje del día. Además, fue Profesor de la Escuela de Periodismo de la Ciudad Condal, que ocupaba dependencias del Ateneo de Barcelona, donde dio clases de titulación, confección y tipografía. En sus alumnos, algunos de ellos veteranos ávidos de obtener el carné de prensa, se encontraban: José Silva Aramburu, crítico taurino y coautor de la letra de la zarzuela «La leyenda del beso»; Ángel Zúñiga, histórico crítico de cine de «La Vanguardia»; el torero balear, periodista y dibujante Quinito Caldentey; Pepe Tous; Luis Carandell; y Luis Ezcurra Carrillo, que fue Subdirector General de Radiodifusión y Televisión. Fue, también, colaborador del diario falangista Arriba, donde escribía diariamente una crónica de actualidad e, incluso, crónicas de boxeo. Durante esta época, también tiene tiempo incluso para vender queso.
 
   En 1953 fue nombrado Director de El Día, en Santa Cruz de Tenerife, donde firmó a diario la muy aplaudida sección «En media columna». En esta época isleña trabó amistad con Carlos Arias Navarro, quien años después sería Presidente del Gobierno. Durante su estancia en Canarias, donde dejó el legado de deliciosas crónicas viajeras, ejerció como corresponsal de guerra. Como hicieran también Luca de Tena, Calvo Hernando, Santamaría o D´Ors, en las navidades de 1957 se desplazó como enviado especial de la Agencia de noticias «Fiel» al contencioso armado de Ifni. También fue colaborador de la revista Villa de Madrid, ciudad de cuyo Ayuntamiento fue Jefe de Prensa y Secretario de la Mesa de Cronistas. Igualmente colaboró en el periódico La Opinión de Zamora.
 
   A Carlos Arias Navarro ligaría años después su futuro profesional. Le acompañó como Asesor en la Dirección General de Seguridad, en 1958; cuando fue Alcalde en el Ayuntamiento de Madrid, en 1965; en el Ministerio de Gobernación, en 1973; y, finalmente, en la Presidencia del Gobierno. Fue Director Técnico de Prensa de Medios de Comunicación del Estado y asesor personal del Presidente del Gobierno.
 
   Estaba en posesión de numerosas condecoraciones y distinciones, entre otras: Cruces del Mérito Civil; del Mérito Militar; del Mérito Aeronáutico; Orden de Cisneros; y Cruz de la Orden del Infante Enrique el Navegante, concedida por el Gobierno de Portugal. También fue nombrado Hijo predilecto de Villalonso.
 
   Miembro de la Fundación Nacional Francisco Franco y Redactor de su Boletín. El 30 de noviembre de 2013 fue nombrado Caballero de Honor de la Fundación Nacional Francisco Franco, FNFF.
 
 
 
 Vídeo-homenaje a los redactores del Boletín de la FNFF
 
 
 
 

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