Se ha hecho viral un vídeo del programa de Antena 3 TV, Y ahora Sonsoles, donde la Ónega entrevista a doña Esperanza Cortiñas, una gallega muy vital con 107 años y mente lúcida, que al responder sobre los diferentes regímenes políticos que había conocido, osó criticar la situación actual y alabar el franquismo. Nada más oír aquello, saltó el resorte censor de la memoria histórica de doña Sonsoles, espetándole a la anciana que en el franquismo no había libertades y que «Con Franco usted no bailaba». Esta admonición causó enorme extrañeza en doña Esperanza, que contestó que sí que bailaba (aunque seguramente no con el mismo Franco), y que no dejaba de largar por lo bajini, pese a ser instada por su hija a que callase, ante la molesta actitud de la Ónega.
Aquello fue toda una lección en vivo y en directo del respeto que gozamos por la libertad de expresión y por la auténtica memoria histórica. Como Sonsoles nació en 1977 y Franco murió en 1975, su conocimiento sobre el franquismo y las prohibiciones bailongas solo pueden deberse a lo que le hayan contado o leído; y siendo hija del afamado Fernando Ónega, es muy posible que a éste le deba gran parte de esos relatos. Pero resulta extraño… Pues si por algo se caracterizó su papá, fue por bailar siempre muy bien al son que le tocasen: desde jefe de prensa de la Guardia de Franco a subdirector del diario Arriba, autor de discursos de Adolfo Suárez, etcétera. ¡Mejor cintura, ni Shakira!