Jacinto Verdaguer, príncipe de los poetas catalanes

 
PPG – FNFF 
 
 
 
Jacinto Verdaguer y Santaló, nació el 17 de mayo de 1845, en Folgarolas, comarca de Osona, Barcelona. A los diez años de edad, ingresó en el Seminario de Vich, donde realizó estudios eclesiásticos. En 1870 fue ordenado Sacerdote y celebró su primera misa en la Capilla de Sant Jordi de Puigseslloses. De 1863 a 1871 residió en Can Tona, una masía entre Vich y Folgarolas, donde escribió sus primeras obras literarias. Ejerció de Vicario en Viñolas de Orís y, más tarde, habiéndole recomendado los médicos, para mejorar su salud, los aires del mar, estuvo durante dos años como Capellán de barco realizando el viaje entre España y Cuba, en la Compañía Transatlántica del que fue Marqués de Comillas, Antonio López y López, entrando en 1877 a su servicio como Capellán de la familia.
 
   Seis años más tarde le fue confiado el cargo de limosnero. En 1880, tras haber obtenido los tres premios canónicos en los Juegos Florales, fue proclamado “Mestre en Gai Saber”. Durante más de quince años, trató con personalidades de la alta sociedad y realizó viajes por el norte de África, Centroeuropa y Oriente Próximo. Realizó también excursiones por el Pirineo, siendo el primer español en pisar la cima del Aneto. Después de regresar de un viaje por Tierra Santa, sufrió una crisis espiritual que le provocó un deseo de purificación y de ascetismo.
 
   A partir del año 1889, se relacionó con videntes y practicantes de exorcismos, convirtiéndose en propagador de estas actividades desaconsejadas por la Iglesia y prohibidas por el Obispo de Barcelona. Posteriormente, se endeudó al comprar una finca en Vallcarca, para salvar una Capilla y establecer allí un lugar de oración y de penitencia, y entonces Claudio López Bru, Segundo Marqués de Comillas y Grande de España, prescindió de sus servicios como limosnero. Junto a los Obispos Claudio Catalán Albosa, de Barcelona, y José Morgades Gili, de Vich, decidieron su traslado al Palacio Episcopal de Vich, para que realizase una cura de reposo.
 
   Después de un tiempo, se trasladó al Santuario Mariano de la Gleba, donde permaneció dos años. En el mes de abril de 1895, desobedeciendo a su Obispo, pasó a residir a Barcelona, al domicilio de la familia Durán, formada por una viuda y sus dos hijas, que había conocido unos años antes. En junio de ese año, publicó un comunicado en la prensa en el que se declaraba, “ante la gente honrada de la ciudad”, víctima de persecución injusta. El Obispo José Morgades Gili, le prohibió celebrar misa y ejercer las funciones sacerdotales. Jacinto Verdaguer respondió con una serie de artículos periodísticos que tuvieron gran repercusión, convirtiéndose el denominado “Caso Verdaguer” en centro de interés tanto social como político. Dos años después entregó una segunda serie de artículos a la prensa, todavía más virulentos.
 
   A finales de 1897, por intervención de los Padres Agustinos de El Escorial y del Obispo de Madrid, el Obispo Morgades se avino a una reconciliación, formalizada con la aceptación de un escrito de retractación de Verdaguer, y en enero de 1898 obtuvo de nuevo las licencias sacerdotales. En febrero de 1898 fue destinado a la Parroquia barcelonesa de Betlem, donde pasó sus últimos años como beneficiado. Fue el poeta español más importante del siglo XIX, escribiendo en lengua catalana.
 
   Su obra comprende géneros y estilos muy diferentes: épica, lírica, prosa, y en todos sobresale de manera extraordinaria. En poesía destacan sus obras: La Atlántida (1877); Idilios y cantos místicos (1879); Canigó, leyenda pirenaica de los tiempos de la Reconquista (1886); Patria (1888); Flores del Calvario (1896): Montserrat (1898); y Aires del Montseny (1901). En prosa, publicó: Excursiones y viajes (1887); Dietario de un peregrino a Tierra Santa (1889); y los artículos En defensa propia (1895-1897). El obispo José Torras Bages lo llamó «Príncipe de los poetas catalanes». También se le conoció como Mosén Verdaguer, al ser Sacerdote. Falleció en la finca Quinta Juan, de Vallvidrera, Barcelona, el 10 de junio de 1902, a los 57 años de edad.