Sanz Briz, salvamento de judíos por orden de Franco

Pío Moa

Dichos, Actos y Hechos 

 

El salvamento de judíos en Budapest por Sanz Briz viene exponiéndose en los harto putrefactos medios de “información”, en alguna novela, documentales, etc., como contraria a las órdenes de Franco. Luis Suárez (Franco y su tiempo) había clarificado el asunto, que traté después en Años de hierro; más recientemente Arcadi Espada (En nombre de Franco) hizo lo mismo, y yo he vuelto a tratarlo en Los mitos del franquismo. Baste reproducir algunos documentos para dejar en evidencia a los profesionales del fraude, aunque no cabe esperar que cesen en sus retorcidos embustes. Después de todo, de ellos viven.

14-10.44. Ministro de Asuntos Exteriores español (Lequerica) a embajador en Washington: Sírvase informar de las gestiones que España viene realizando e instrucciones concretas nuevamente a nuestro embajador en Berlín para que realice con el máximo interés cuantas gestiones sean necesarias en defensa de las personas e intereses israelitas en general, y en especial de los hispanoamericanos (…) De forma constante y reiterada se van haciendo toda clase de esfuerzos, no siempre con éxito, para defender a los sefarditas que se hallan en campos de concentración alemanes, habiéndose conseguido, como es bien sabido, que varios cientos de ellos hayan podido entrar en España y salir con plena libertad.

 

La situación empeoró desde el 9 de noviembre, cuando los rusos entraban en Hungría:

 

14-11-44: Ministro al Embajador en Washington: Habiéndose tenido noticia de que contra promesas formales reiteradamente hechas por Gobierno húngaro éste desconoce validez pasaportes españoles y de algunos países hispanoamericanos a sefarditas, he ordenado a Legación de España en Budapest presente la más enérgica reclamación pidiendo inmediatas y amplias satisfacciones. Gobierno está decidido a hacer respetar por todos medios sus derechos a este respecto, de suerte que la protección pueda ser efectiva.

 

15-11-44: Sanz Briz (encargado español de negocios en Budapest) al ministro: “Ante la continuación de las horribles atrocidades que se cometen contra los judíos, esta mañana el Nuncio ha reunido a los representantes de los países neutrales. Hemos acordado por unanimidad hacer gestión colectiva cerca del Gobierno húngaro pidiendo cese la persecución y se les trate de modo más humano.

 

16-1-44: Ministro a embajador en Washington: “Encargado de negocios en Budapest ha podido conseguir que protección española sea extendida oficialmente a favor de trescientos judíos a quienes, a pesar de no tener nacionalidad española, se ha concedido pasaporte nuestro provisionalmente. Además ha expedido cerca de dos mil “cartas de protección”, con las que hasta ahora se han salvado a otros tantos judíos de campos de concentración y deportación . Esta actuación hecha tras insistentes órdenes por nuestra parte y múltiples reclamaciones diplomáticas ha tenido extraordinaria eficacia precisamente en momentos en que los judíos eran más perseguidos. En cambio, cuantas gestiones se han hecho para traerlos a España han resultado infructuosas y en vista de las atrocidades cometidas el día 14 de noviembre, se han reunido representantes de Suiza y España bajo presidencia del Nuncio acordando hacer gestión colectiva pidiendo al gobierno húngaro trato más humano y cese de la persecución según viene solicitando insistentemente nuestro Encargado de Negocios.

 

En Francia han pedido, como es público, acogerse a nuestra protección, y muchos cientos de judíos que han pasado la frontera a partir del verano de 1943, en múltiples grupos o que han beneficiado criterio especial tolerancia en nuestros puestos fronterizos al presentarse sin documentación alguna. Los que quedaron en Francia obtuvieron después de repetidas gestiones Embajada española que sus bienes sometidos en principio a confiscación por autoridades alemanas pasaran a administradores españoles, salvándose así la casi totalidad de sus intereses (…). Judíos griegos han sido objeto de especialísima atención y después de haber hecho venir a varios grupos sacándolos de campos de concentración seguimos reclamando insistentemente mejor trato para todos los sefarditas españoles en campos de concentración, ya que hoy no pueden venir, habiéndose logrado éxito positivo en estas reclamaciones, pues unánimemente los salidos de campos de concentración presentan aspecto inmejorable y manifiestan que el trato ha sido relativamente satisfactorio. No se tiene conocimiento de una sola defunción de sefarditas españoles o protegidos nuestros en campos de concentración. En Bulgaria y Rumania, hasta la entrada de las tropas rusas, ha sido incesante la actuación de nuestras legaciones, obteniéndose resultados sumamente satisfactorios pues prácticamente toda la colonia sefardita (salvo casos excepcionales) ha podido subsistir en condiciones de muy grave dificultad. Múltiples y apremiantes reclamaciones han dado lugar en algún momento a situación difícil de nuestra representación en Berlín, que ha tenido que soportar momentos de malhumor por parte de las autoridades alemanas que no aceptaban interviniéramos en asuntos en los que (no) teníamos título jurídico para actuar (…) .

 

16-11-44: Ministro a embajador en Berna: Ruego a V. E. solicite apoyo ese Gobierno cerca del Gobierno alemán para conseguir traslado a Suiza de un grupo de 150 sefardítas internados actualmente en Bergen-Belsen y provistos de documentación española y cuya entrada en Suiza ha sido ya, al parecer, autorizada por Policía Federal.

 

17-11-44: Sanz Briz al ministro: Ayer por la mañana quedó cumplida la orden de V.E. telegrama 92. Añadí verbalmente contenido telegrama 93. Este ministro de Negocios exteriores (húngaro) me dijo lamentaba los hechos acaecidos de los que eran responsables milicianos del partido, a quienes continuamente se exhortaba a respetar la documentación extranjera. A modo de excusa añadió que lo mismo había ocurrido con otras legaciones y no solo la de España. En mi presencia telefoneó a la persona encargada de las deportaciones y le ordenó destacar un oficial que, acompañado de un empleado de esta cancillería, se dedicase a recoger judíos españoles de la interminable caravana que a pie se dirigía hacia la frontera alemana. Este gobierno está completamente desbordado y es incapaz de hacer respetar sus órdenes. Lamento comunicar a V. E, que la mayor parte de la población de Budapest espera impaciente la llegada de las tropas rusas, cuya actitud no podrá ser peor as la adoptada por los actuales gobernantes.

 

17-11-44: Sanz Briz al ministerio: Esta mañana he podido conseguir impulsar liberación de 71 judíos que se hallaban en un campo de concentración cerca de Budapest. Muchos de ellos no habían comido en tres días y algunos tienen (falta algo)

 

22-11-44: Sanz Briz al ministerio: Este Ministro de Negocios Extranjeros ha reunido a representantes países neutrales dando lectura a un memorándum explicando manera este Gobierno va a resolver el problema judío. Los judíos protegidos por los países neutrales serán concentrados en un geto (sic) especial hasta el momento de su traslado a los países protectores. Se les permite pasear por la calle del geto de ocho a nueve de la mañana. Los no protegidos y hábiles para el trabajo serán “prestados” a Alemania. La suerte definitiva será resuelta al final de la guerra. Los demás quedarán concentrados en un geto. Se señalan algunas excepciones para los judíos que han prestado servicios especiales a la patria y para los sacerdotes cristianos de origen judío.

 

25-11-44 Sanz Briz a ministerio: Ayer envié enérgica protesta a este ministerio de Negocios extranjeros por las graves lesiones producidas a un súbdito paraguayo por los milicianos del partido.

 

26-11-44: Sanz Briz a ministerio: A pesar de buena voluntad de este Ministro de Negocios Extranjeros, cada día milicias irresponsables producen incidentes contra los protegidos españoles que se encuentran concentrados en casas designadas por este gobierno, situadas en un gueto especial. Esta Representación protesta continuamente ante este Ministerio de Asuntos Exteriores.

 

2-12-44. Del embajador en Washington (2-12-44): El Congreso judío mundial clausurado ayer aprobó conclusiones publicadas hoy en esta prensa, entre las cuales se expresa agradecer España protección judíos perseguidos especialmente Hungría. Verbalmente miembros importantes mencionado Congreso me han expresado también este agradecimiento.

 

8-enero 1948 Delegado del Vaad Leumí para España y Marruecos al ministerio español de Asuntos Exteriores: “Recibido instrucciones del Vaad Leumí Consejo Nacional Judío de Palestina para rogar a Vuestra Excelencia acepte muy sentido pésame de comunidad hebrea por fallecimiento Cónsul adjunto España, señor Manuel Allendesalazar durante disturbios en nuestra tierra ajenos a nuestra responsabilidad. A esta condolencia agrego mía propia considerando generosa ayuda del Gobierno español a los hebreos sefarditas de Europa oriental durante pasada guerra y por consiguiente necesidad continuación relaciones amistad entre España y Estado Judío en creación. Ruego haga cable extensivo a familia finado respetuosos saludos. El cónsul adjunto español había sido asesinado por la Haganá, la organización de combate sionista en el asalto al hotel Semíramis, en Jerusalén, durante la lucha por la independencia de Israel.

 

Etc. Queda, pues, perfectamente claro, que Sanz Briz obró en todo momento bajo las instrucciones de Lequerica, ministro de Asuntos Exteriores, es decir, del propio Franco en última instancia. Cualquier persona con sentido común entiende fácilmente que no podía ser de otro modo, y menos cuando los necios que pretenden lo contrario pintan a Franco como un dictador rígido y totalitario que nunca fue. Sanz Briz fue un diplomático franquista que siguió haciendo una brillante carrera a pesar de su supuesta “desobediencia”.

 

Por lo demás, Sanz Briz no fue un caso único ni mucho menos. El señor Rolland de Lavilleón escribió: Además de don Sanz Briz hicieron lo mismo don Sebastián Romero Radigales en Grecia, don Julio Palencia Álvarez en Bulgaria y mi propio padre, don Bernardo Rolland Miota en Francia, de donde salieron hacia España entre 1941 y 1944 más de cinco mil judíos, según cálculos de Haim Avni.

 

En febrero de 1970 el rabino Chaim Lipschitz , del seminario hebrero Torah Vodaath en Brooklin, declaraba a Newsweek: Tengo pruebas de que el jefe del Estado español, Francisco Franco, salvó a más de sesenta mil judíos durante la II Guerra Mundial. Ya va siendo hora de que alguien dé las gracias a Franco por ello.

 

El escritor italiano Enrico Deaglio en su libro La banalidad del bien, referido a Giorgio Perlasca (fascista italiano) que con Sanz Briz salvó a tantos judíos en Budapest, señalaba: Si bien el papel de la España franquista en las operaciones de salvamento de los judíos europeos ha sido silenciado casi del todo, fue decididamente superior al de las democracias antihitlerianas. (mencionado por E. Palomar Baró)

 

La ayuda a los judíos perseguidos se prolongó más allá de la guerra mundial. El primer jefe del Mosad, Iser Harel, explicó cómo España colaboró en trasladar a un número indeterminado de judíos, quizá hasta cien mil, de Marruecos a Israel entre 1957 y 1963: La situación de los judíos en Marruecos se había vuelto insostenible y arriesgada después de que Francia evacuara esa colonia en 1956, y las autoridades marroquíes decidieron impedir su salida del país.

 

Observaciones:

 

1.- Cuando se habla de judíos españoles o sefardíes, debe entenderse que el dictador Primo de Rivera había ofrecido a los sefardíes la nacionalidad española, que muy pocos aceptaron. El decreto había caducado, pero el franquismo lo utilizó como si no fuera el caso.

2.- Franco no tenía ninguna obligación de salvar a los judíos, que en su mayoría le habían sido hostiles durante la guerra civil y seguían siéndolo. Además, en España se ignoraba el carácter exterminador de la persecución, suponiéndose los rumores de ese género como una típica mentira de guerra. El motivo fue simplemente humanitario, sin esperar especial gratitud.

2.- Aunque muchos jefes religiosos y algunos políticos judíos han expresado su agradecimiento a Franco, la postura de Israel fue la de boicotear al régimen español e impedirle la entrada en la ONU.

3.- Debe contrastarse la gratitud de muchos judíos con la sucia indecencia de los antifranquistas españoles, profesionales de la calumnia, como no dejan de demostrar año tras año en los grandes medios de masas, especialmente El País o las televisiones públicas y privadas, con pocas excepciones. Verdaderamente llevamos muchos años viviendo bajo el estomagante imperio de la mentira y la farsa.

4.- Debe contrastarse, igualmente, la labor del franquismo en este aspecto, con el escasísimo apoyo recibido por los judíos de Inglaterra o Usa, las cuales obraron como si la persecución no tuviera carácter grave, pese a tener informes en contra de las autoridades judías. Lo he señalado en varias ocasiones, particularmente en Los mitos del franquismo. En ocasión de su visita a Auschwitz, Ariel Sharon dijo: “Los Aliados conocían la aniquilación de los judíos. La conocían y no hicieron nada… Todas las sugerencias de operaciones de rescate presentadas por organizaciones judías fueron rechazadas. Simplemente no quisieron enfrentarse a eso”.