Pensamiento de Franco: El Movimiento y las necesidades nacionales

 

Un deber de los hombres políticos hacia la Nación es el considerar al fin de cada etapa si el movimiento político que acaudillan llena en cada hora las necesidades que la Nación demanda. Por no haberlo hecho así y subordinar la Nación a los intereses de los partidos y no la política al interés y servicio de la Nación, España sufrió tantos quebrantos y años de desgobierno, que aún contemplamos hoy fuera de nuestras fronteras. Por ello hemos de examinar nosotros si las necesidades de la España de hoy responden a las características que imprimimos a nuestro movimiento político hace veinte años, y si, como consecuencia de ello, tuviéramos algo que rectificar. La serenidad y calma con que se enfocaron y desarrollaron en el tiempo nuestras leyes constitutivas, y las conquistas alcanzadas durante estos años, han hecho que conserven toda su eficacia y lozanía en la hora presente. El que bajo sus principios se haya podido liquidar una guerra, salvarnos de otra, resistir sus salpicaduras y las conjuras internacionales, despertar una nueva conciencia en la Nación y hacerla resurgir en todos los órdenes, constituye la más perfecta ejecutoria que un sistema político pudiera ambicionar. Esto es lo que une y lo que da arraigo y continuidad a nuestro Movimiento.

Si pasamos a contemplar el panorama desde las perspectivas que el exterior nos ofrece, su trascendencia se dibuja con mayores rasgos, pues al contemplar los males que fuera se sufren y las causas que en su mayor parte los promueven, podemos apreciar mejor los que padeceríamos en esta hora si nuestra Cruzada liberadora no nos hubiera permitido extirpar las causas de nuestros viejos achaques.

Francisco Franco Bahamonde

(24-X-1957: Al Consejo Provincial del Movimiento de Barcelona.)


Publicado

en

por