Estrellita Castro, la del caracolillo en la frente

 
 
PPG – FNFF 
 
 
Estrella Castro Navarrete, cuyo nombre artístico fue “Estrellita Castro”, nació en Sevilla, el 26 de junio de 1908, en la calle Mateos Gago. Era hija de un pescadero gallego, José Castro, y de una malagueña, y la menor de once hermanos. A los 10 años de edad, ya era una conocida cantante de saetas. A partir de los 11 años, asistió a la Academia de Manuel Real Montosa, el “Maestro Realito” donde, para poder pagarle las clases, realizó las tareas domésticas de su casa. Con 12 años ganó un concurso del Ateneo Mercantil de Sevilla, lo que le permitió actuar en un teatro. También, a esa edad, actuó por primera vez delante de los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia.
 
   En sus comienzos la ayudó mucho el gran torero Ignacio Sánchez Mejías, que la vio actuar en un festival benéfico, y le regaló una moneda de oro. Hizo su debut en el sevillano “Salón Novedades”; después cantó en “El Tronío”, de la calle Sierpes y, posteriormente, en los principales teatros de España, así como de París, Londres, Berlín, Roma, Nueva York e Hispanoamérica.
 
   Se la puede considerar la creadora de la “canción andaluza”, alcanzando gran popularidad en los años 30 y 40 del pasado siglo XX. Su mayor éxito fue la canción Mi Jaca, obra de Ramón Perelló y, también, Suspiros de España, pasodoble compuesto por el Maestro Antonio Álvarez Alonso, en Cartagena, el año de 1902. Otros de sus mayores éxitos, fueron: La morena de mi copla; María de la O; María Magdalena; Mari Cruz; y Los tientos del reloj.
 

   Fue denominada como “La reina del pasodoble”, pero también interpretó zambras, boleros, mazurcas e incluso tangos, género al que fue introducida por Carlos Gardel. En flamenco, cantó temas tan diferentes como: serranas, fandangos, soleares, colombianas, guajiras, tanguillos, sevillanas y saetas. Durante su vida, grabó más de mil canciones.
 
   El Alzamiento Nacional del 18 de julio de 1936, le sorprendió en Madrid, de donde pudo huir para salvarse de la dominación roja, y a través de Cuba, pasó a Alemania. Su compromiso con la Causa Nacional fue muy claro. Era admiradora de José Antonio Primo de Rivera y del Caudillo de España Francisco Franco.
 
   Su éxito como cantante le abrió las puertas del cine, llegando a ser una de las actrices más cotizadas y populares de los años 30, junto con Imperio Argentina. Realizó un corto en 1933, Mi patio andaluz, pero su verdadero debut en el cine fue la película Rosario la cortijera (1935). Entre sus películas, sobresalen; Suspiros de España (1936); El Barbero de Sevilla (1936); y Mariquilla Terremoto (1938), todas ellas rodadas en Alemania. En estas películas cantó acompañada de la Orquesta Sinfónica de Berlín.
 
   También son de destacar: Los hijos de la noche (1939); La gitanilla (1940); Torbellino (1941); Los misterios de Tánger (1942); La Patria chica (1943); La maja del capote (1943); Gitana tenías que ser (1953); Han robado una estrella (1963); La niña del patio (1967); La casa de los Martínez (1971); y Casa Flora (1973).
 
   Su filmografía alcanzó más de cuarenta títulos. En febrero del año 1962, le fue concedida la Medalla al Mérito en el Trabajo. Sus últimos años los pasó junto a su representante Demetrio Corbi y, tras su muerte, con su íntima amiga, Marifé de Triana. En 1978, se le dedicó una calle en la Alameda de Hércules de Sevilla. También tiene un azulejo en la sevillana Plazuela de los Carros, donde vivió algunos años. Falleció en Madrid, el 10 de julio de 1983. Fue enterrada, por propia voluntad, con el caracolillo sobre la frente, que fue su signo distintivo, al igual que la mantilla española, era su prenda favorita.