PPG – FNFF
Fray Julián de Madrid, cuyo nombre de pila era el de Julián Antoranz Merino. Nació en Madrid, en el Barrio de Tetuán, en 1921. Pasó la Cruzada de Liberación Nacional en Madrid, con catorce años, refugiado con su familia en la Legación de Honduras, tras lo que se alistó al Frente de Juventudes, siendo su ideario falangista e interés en combatir al comunismo lo que le llevó a alistarse en la División Azul con 19 años.
Se fue a Rusia con el primer contingente, prestando el juramento en Graffenwöhr y efectuando la gran marcha a pie hasta Smolensko donde les comunicaron que no seguirían hacia Moscú sino que la División sería empleada en el frente del Voljov. Estuvo en Rusia en dos fases: La primera destinado en la 1ª Compañía, del I Batallón, del Regimiento de Infantería 269. Fue enlace del Teniente Setuain y conoció a Luis Nieto “y a otro sargento al que mataron” cuando éstos confeccionaban en una isba que llamaban “La Casa del Señor” las listas con las propuestas para las concesiones de las primeras cruces de hierro.
Tomó parte en los combates de Nilitkino y Possad, acción esta última en la que fue herido en un brazo el 16 de noviembre de 1941, siendo evacuado vía Otenski y visitado en el hospital por el General Muñoz Grandes. Aunque se reincorporó a su Compañía, al ser detectado como menor de edad fue repatriado. Ya en España, por la mediación de Ángel Maruri ingresó, como muchos otros Divisionarios, en el Instituto Nacional de Previsión, INP, pero al ser llamado en 1943 para prestar el Servicio Militar, a fines de aquel año y ya con 21 años, decidió volver a Rusia. En esa segunda fase fue destinado a la 10ª Compañía, del III Batallón, del Regimiento de Infantería 263, cerca de Pushkin, incorporándose a una posición llamada “La Ermita”.
Resultó, posteriormente, herido en el brazo por granada de mortero por lo que fue evacuado a Königsberg vía “Carlos Gardel”, Riga y Vilna. Una vez dado de alta se reincorporó, esta vez a la Sección de Asalto. Cuando la División Azul fue repatriada, se alistó en la Legión Azul, Legión Española de Voluntarios. Fue enviado a Jamburg y destinado como enlace a la Plana Mayor de la 2ª Bandera. En ella recibió la que sería su tercera herida de guerra, también en un brazo por metralla de mortero pesado, siendo evacuado al “Hospitalillo” de Riga para ser operado y donde el Coronel García Navarro le informó de que por su actuación le propondría para la Cruz de Hierro de 2ª Clase que, efectivamente, le concedieron el 26 de enero de 1944, y que le fue impuesta en Jäneda. Se reincorporó a su Bandera en Luga, donde sostuvieron duros combates en los bosques.
Finalmente, fue concentrado en Königsberg, desde donde lo repatriaron con los últimos de la LEV, llegando a Vitoria. Además también obtuvo otras condecoraciones, como la Placa de Herido en Plata y la Medalla de la Campaña del Este. Vuelto a España y al Instituto Nacional de Previsión, en concreto a la Caja de Accidentes de Trabajo, en el Paseo de la Castellana 14, de Madrid, la vocación religiosa que ya había sentido incluso antes de ir a Rusia lo llevó a ingresar en la Orden de San Jerónimo, a los 26 años de edad, profesando en el Monasterio de Santa María del Parral.
La Cruz de Hierro la donó para la imagen de la Virgen de la Parroquia del Barrio de Tetuán de Madrid, sin saberse qué habrá sido de ella. Religioso ejemplar, desempeñó durante muchos años el oficio de portero y se mantuvo lúcido y servicial amante del Señor y de su querida División Azul. Se levantaba a las 4:45 h de la madrugada y preparaba puntualmente el refectorio para el desayuno. Era habitual verlo con un libro sobre la vida de algún Santo entre las manos. Concelebró la Santa Misa con la que se inauguró el Monumento a los Caídos de la División en el Cementerio de la Almudena de Madrid.
En su hábito religioso lucia el escudo de la División Azul, para lo que había obtenido la preceptiva aprobación de su Superior. El Hermano Fray Julián de Madrid, falleció en el Convento de Santa María del Parral, Segovia, el 30 de noviembre de 2014, a los 93 años de edad.