Tomás Salvador, Divisionario y escritor

 
PPG – FNFF
 
 
 
 

Tomás Salvador Espeso nació en Villada, Palencia, el 9 de marzo de 1921. Se trasladó a Madrid con sus padres a los ocho años de edad, y fue internado en la Fundación Caldeiro, que llevaban los Padres Capuchinos, hasta los quince años.
 
   En Madrid le sorprendió la Cruzada Nacional de Liberación, que dividió a la familia: el padre y el hermano mayor, en el Bando Nacional como Guardias Civiles, en Jaca; la madre, con Tomás y Félix, su hermano pequeño, en zona roja, en Madrid.
 
   Salvador tuvo que hacerse cargo de su supervivencia, practicando toda suerte de oficios: alpargatero, peón de albañil, buscador de carbonilla y desechos en los vertederos… Entonces empezó a leer con voracidad. Se recluía en bibliotecas públicas, donde adquirió una sólida cultura. En 1938 fue movilizado forzoso, con la Quinta del Biberón, y llevado al Frente de Guadalajara. Al finalizar la guerra, hizo el Servicio Militar.
 
   Se afilió a FET y de las JONS. En 1941 se alistó Combatiente Voluntario en la División Azul para combatir el comunismo en la URSS, como Soldado. En Rusia pasó 23 meses. Volvió repatriado a España, con una sordera provocada por la explosión de una granada en su trinchera. Ingresó en el Cuerpo General de Seguridad, y fue destinado como Inspector de Policía a Barcelona, donde pasó el resto de su vida. Escribió novelas de aventuras, históricas, policíacas, de ciencia ficción, de denuncia, y novela infantil, además de siete obras de narrativa corta y varios ensayos. 
 
   Fue colaborador de numerosas publicaciones, en especial del periódico La Vanguardia Española de Barcelona. Sobre la División Azul escribió tres obras: División 250 (1954): obra clásica de la División Española de Voluntarios en el Frente del Este. Una emotiva recreación literaria con un único personaje central: toda la División; 10 de febrero en Krassny Bor (1962): donde recogió algunos capítulos de la División 250; y Camaradas 74. Los Excombatientes 35 años después (1975): un libro que dijo haber escrito por “necesidad biológica”, para mostrar que los combatientes divisionarios no eran ni monstruos ni superhéroes.
 
   En 1956 fundó, junto con Julio Manegat, el Premio de la Crítica. A partir de 1970 dirigió la Editorial Marte, que sacó algunas grandes obras sobre la División Azul y ediciones ilustradas de obras clásicas. También escribió en diarios y revistas, fue asesor editorial de Plaza y Janés, y colaborador del editor de la revista y la Editorial Destino, José Vergés. Fue finalista del Premio Nadal con Historias de Valcanillo (1952).
 
   Junto con José Vergés escribió las novelas Garimpo (1952) y La virada (1954), galardonada con el premio del Instituto de Cultura Hispánica. Con Cuerda de Presos (1953) obtuvo el Premio Ciudad de Barcelona y el Premio Nacional de Literatura. Y con su obra El atentado (1960), recibió el Premio Planeta.
 
   Son muy divertidas sus novelas de humorísticas, tituladas con el nombre de uno de sus famosos personajes, “Manolo”: Les presento a Manolo, Vuelve Manolo, Manolo el humorista, Manolo el filósofo y ¡Ave, Manolo!. Citar la ambiciosa y extraordinaria trilogía de Martin Lord, compuesta por: Y…; T; y K (killer). Entre sus otras obras, destacan: El charco (1953); Esta noche estaré solo (1954); Los atracadores (1955); Hotel Tánger (1955); Diálogos en la oscuridad (1956); El haragán (1957); Cabo de vara (1958); El Chano (1958); Lluvia caliente (1958); La nave (1959); El agitador (1960); Dentro de mucho tiempo… (1961); Una pared al sol (1967); Un lugar llamado lejos (1979); y Camello para un viaje (1984).
 
   También realizó el estudio La novela española de la postguerra (1966). De su labor como lexicógrafo puede destacarse el Diccionario de la Real Calle Española (1969). También cultivó la novela histórica con La guerra de España en sus fotografías (1966); El arzobispo pirata (1982); y Las compañías blancas (1984). Estuvo casado y tuvo cuatro hijos. Falleció en Barcelona, el 22 de junio de 1984.
 
 
 

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