Pensamiento de Franco: Creciente atención a los problemas de los emigrantes

Condiciones de trabajo y seguridad social, vivienda, educación y lazos culturales y afectivos con España

Queremos que la emigración sea únicamente la expresión de la libertad del hombre para realizar su vida y la de los suyos, en uno u otro lugar de la Tierra, y no una consecuencia forzada por circunstancias económicas. La creación de puestos de trabajo y oportunidades para que la Patria no pierda ninguno de sus hijos es objetivo primordial de nuestra política. Pero quiero deciros también que, en cualquier caso, nuestra atención a los españoles emigrantes es creciente cada día y que las condiciones en que se desenvuelve su vida y trabajo constituyen para nosotros motivo de preocupación y atención especialísima, como corresponde a su condición de españoles que, por estar más lejos y en circunstancias de mayor dificultad, necesitan más que nadie el cariño y los desvelos de la Patria. A través de los acuerdos con los Gobiernos de los distintos Estados y de la acción directa del Estado español, procuraremos cada día mejores condiciones de trabajo y seguridad social, nos preocuparemos de vuestros problemas de vivienda y educación, así como de mantener vivos los lazos culturales y afectivos con España. Lucharemos con todas nuestras fuerzas para hacer prosperar en el ámbito internacional una consideración para el trabajador emigrante igual que la que tenga el trabajador nacional, de acuerdo con la dignidad personal de todo hombre; evitando toda discriminación y haciendo participar a los trabajadores adecuadamente en la prosperidad y desarrollo que están construyendo con su trabajo. Espero que vuestras tareas en el Congreso nos ayuden a encontrar la manera de hacer más eficaces nuestras acciones y atender mejor las necesidades de los españoles que precisamente por estar más lejos están más cerca de nuestro corazón.

¡Arriba España!

Francisco Franco Bahamonde

(5-X-1971: IV Congreso de la Emigración española.—Oviedo. Asturias.)