¡Tu carrito está actualmente vacío!
Puedes consultar la información de privacidad y tratamiento de datos aquí:
- POLÍTICA DE PROTECCIÓN DE DATOS
- SUS DATOS SON SEGUROS
No necesito recordaros los esfuerzos del Régimen para hacer al hombre libre. No bastan para ello las simples declaraciones formales de libertad. Un hombre no es libre cuando no tiene cubiertas sus necesidades más elementa-les: de casa, de amparo en la enfermedad, de lo necesario para la vida.
Cuando no tiene previsto y asegurado su futuro, cuando está sumido en la ignorancia o cuando es objeto de explotación por hombres o por empresas, ¿qué importa que se le concedan derechos, que quedan sólo en el papel y que no puede ejercitar? Para nosotros, hombre libre es aquel que posee un salario suficiente, un empleo estable, una seguridad social que le cubra todos los riesgos, una cultura media y un nivel de vida que le permita participar en los bienes de la civilización moderna.
Una nación pobre necesita del progreso económico para poder atender a cubrir esas mínimas necesidades. A lo más que puede llegar es a la distribución más justa de la renta; pero aun suponiendo que llegase al ideal de una perfecta igualdad, estaría en la modesta cifra, tan repetida hoy, de una reducida renta por cabeza. He aquí cómo una revolución social no consiste en destruir, sino en multiplicar los bienes.
Francisco Franco Bahamonde
(4-VII-1966: Acto de afirmación sindical—Barcelona.)